jueves, noviembre 26, 2009

Cambiar de vestimenta.

Hace unos días atrás recibi una llamada de una personita muy importante en mi vida, y lo cual me sorpredio, claro que yo había ya hablado con ella hace unos días atrás. Luego de ayudar a mi amigo de Ica que regrese a sus dominios con su dotación de factor me dirigí a la oficina a darme el encuentro con ella.

Allí luego del abrazo fuerte por el tiempo de ausencia de ambos y que sólo un celular unió por momentos, comenzamos a relatar nuestras aventuras desde el último día que nos habíamos visto.

NO era muy cómodo ya que un amigo a lado no era buen testigo de cosas que no debía oír, por lo tanto a terminar mis quehaceres y salir a caminar como en los años que la conocí.

Las calles del distrito serían los cómplices de la conversación, una idea y una llamada cambiaría todo. Ahora en un lugar acogedor, un amigo, una amiga, un lonche nada sano.

Luego el frió [para ella] se vuelve mi aliado y permite que me abrace, siempre he sentido algo diferente a las personas a mi lado, pero ante la duda de lo que será no soy tan estúpido como para malograr la linda amistad que nos une.

Tanto palabreo mediático para comentar el punto de mi titulo. En plena Av. Arequipa me dice debes cambiar de vestimenta...futuro magister y sobretodo ya no eres chibolo [joven].

Mi clásico polo, jean y zapatillas no deben ser ya mi forma de vestir. Más aún que empezaré a entrar en un mundo de seriedad y trabajo con personas de mi edad para arriba.

Así que ya empece, primero unos zapatillos algo mas cómodos de los que tengo y obvio más nuevos xD luego vendrán el set de camisas y jean nuevos.... hay que mejorar la imagen diría mi amigo Omar.

"Tengo razones para entenderte, tengo mil historias para comprender que todo te irá bien..."

1 comentario:

Anónimo dijo...

recuerda que el habito no ahce al monje...