martes, diciembre 24, 2019

Y mi vida cambió, otra vez.


El 25 de noviembre recibí una llamada que cambiaría mi año 2019, y de paso, movería toda mi vida de una manera muy rápida. Unos días antes, me habían dicho que era posible que me llamaran para un dictado de clases con una buena paga. Pues, ese fue el día en que llegó la llamada. 

Lo imprevisto de todo fue el empezar a trabajar a los 2 días de haber recibido la llamada, no fue fácil ¿por qué? porque no solo eran dictar 12 horas pedagógicas, sino también cumplir un total de 35 horas en la Escuela además de empezar a desarrollar el currículo de Biología del 2020 desde cero. Mi duda fue la que algunos se habrán dado cuenta ¿qué pasa con el instituto, con la universidad, con la pre y sobretodo con la tesis?. Seguro todos estarán pensando en ¿por qué cambiar todo esto? En particular la tesis de la maestría que había empezado y en uno de los centros de investigación más importantes del Perú en el área de genética. 

Fueron 24 horas donde tuve que decidir que dejar y qué no. Ya había aceptado la propuesta de la Escuela, por el tema económico, en un mes ganaría lo que gano en 3 meses sumando todos mis trabajos, no podía perder esta oportunidad. Sin embargo, decidir que dejar y que no, fue lo que me agotó mentalmente. La universidad y la pre no chocaban con el horario de la escuela, pero si el instituto y obvio la tesis, esta última mas que nada por la distancia que tendría que hacer para llegar al laboratorio, incluso con taxi (ademas de salir carísimo) me demoraba mucho en llegar. 

Tres de mis 4 horarios de la mañana en el instituto se cruzaban con el nuevo empleo. Tuve que explicar que iba a dejar estas clases en 2 días lo cual no fue del agrado de la jefa administrativa pero no tenía otra opción, al final aceptó. Su incomodidad más grande fue el hecho de haber pasado yo a docente a tiempo completo, y obvio, no lo iba a cumplir. Sin embargo, dictaré todas las noches en el próximo año para tener la mayor cantidad de horas. Lo lindo fue la foto que nos tomamos con mi salón el cual yo era su tutor y es el que mas pena me dio dejar:


Lo que me fue mas difícil era ir hasta el laboratorio, con todo avanzando, la distancia ya mencionada no podía ir y tuve que en primera instancia decir que una semana no asistiría para luego llamar a mi asesora y por teléfono explicarle que no iría ya al laboratorio por lo que les cuento al inicio de esta bitácora. Lo que mas me dolió fue cuando me dijo "No sé que decirte Javi". Sentí que la defraudé, que defraudé a todo el laboratorio, fueron los segundos en los cuáles pensé que había tomado una mala decisión, pero la decisión estaba tomada y no podía retroceder. Me dijo que fuera lo antes posible para conversar en persona pero con pesar y vergüenza debo confesar que hasta ahora no he podido. Esta foto la tendré siempre como un gran recuerdo:


Ahora que esta por acabar el año 2019 y avizoro un 2020 con mucho trabajo en una meta que debo cumplir muy ambiciosa en la escuela pero de la cual yo sé que no será para quedarme ahí de por vida sino solo una etapa en la cual quiero conseguir cosas palpables. El siguiente año no será necesario enseñar ya en la pre e incluso no podré seguir en la Universidad por los horarios, sólo serán la escuela y el instituto sumado a algo que quiero empezar y terminar aprovechando que volveré al área de educación. Ya les iré contando si lo hago, espero que sí en un mes debería de empezar esa nueva etapa. 


"Las cosas no siempre son como uno quiere, pero las oportunidades en la vida no las voy a desperdiciar, no de nuevo".


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