domingo, abril 24, 2011

Gato muerto.

Salia del Hospital donde esta mi madre internada, caminando por el parque de la medicina peruana y al borde de la avenida Grau en el centro de Lima. Cuando llegue al paradero donde espero al Linea 70 para ir a mi casa veo en la esquina con sorpresa a un gatitio echado. Creí que estab durimiendo pero cuando me acerco y miro bien estaba muerto.


Su cuerpo estaba entero, es decir, pense que no lo habian atropellado, pero cuando veo bien su cabeza con la boca entre abierta y la lengua que salia junto a los dientes y parte de la carnosidad tipica del interior de la cavidad bucal me di cuenta que haia sido aplastado por la cabeza o un golpe a la misma con mucha fuerza.


Me quedé mirando un rato lamentando la muerte del animal tan pequeño y tan inofensivo, me vino a la mente muchas cosas, entre ellas que toda esta mañana he estado leyendo o pensando en la muerte.


Tan sólo 5 minutos antes me imaginaba en mi casi atropello, digo casi pues el taxi ese paso a menos de 2 metros de mi pero con una velocidad que me hizo pensar que hubiera sido de mi si me golpeaba. De pronto se vino a mi mente que seria llevado al Dos de Mayo y que entre mi inconcencia yo decia "tengo hemofilia y soy del Alemenara". Luego de esto solo imaginar que ni el factor me salvaria del cajón y que algunos preguntarian porque no fui al ingles o por qué me ausente a la reunión de directiva de mañana.


Este pensamiento fugaz me hizo recordar lo que leia tan sólo 30 minutos antes camino al hospital a ver a mi madre. La muerte, es algo que sólo los humanos sabemos llegaremos a enfrentar en algun momento de la vida. No me importa cuando moriré, ni siquiera como.


Lo que me preocupa es llegar a ese momento y saber que no he hecho algo en mi vida. QUe he logrado algún objetivo y sobretodo que compredí lo que Dios me tenia designado en este universo. La sensación que mi muerte solo seria un recuerdo de una generación me abruma más que otra cosa.


No creo en las casualidades, y todo esto es una señal. LA cual creo haber descifrado.Pero nunca me han gustado los sacrificios, mas aún cuando cada vez que los hago mayormente termino peor o eso da a enteder el destino.


De alguna manera estoy huyendole al Buen Combate, mientras el tiempo transcurre y el tiempo lo considero el peor de mis enemigos, el mas cruel y mortal de todos. EL gato muerto que vi me recuerda que si es cierto que se tiene una tranquilidad en ese estado, no se puede hacer más e incluso ser olvidado con el paso de las generaciones futuras. Dónde estará mi legado?



"Tenía ganas de agacharme y levantar al gato, pero en el fondo su estado ahi inerte puede servir de inspiración a otra persona como conmigo, lo fué..."

No hay comentarios.: